Tras perderse en una carretera de Gales en una noche de tormenta Michael Starkwedder se acerca a una mansión para pedir ayuda, pero cuando entra en la casa se encuentra a un hombre en silla de ruedas muerto de un disparo en la cabeza y a una mujer con un revólver en la mano. Ésta, Laura Warwick, afirma ser la esposa del hombre que acaba de morir, un hombre cruel, egoista y despiadado, y se confiesa culpable del asesinato.
Pero algo en aquella extraña escena no encaja para Starkwedder, todos los hechos parecen evidentes... demasiado evidentes, así que decide no llamar a la policía. En la casa viven más personas y todos ellos son sospechosos del asesinato. ¿Fue Laura Warwick la que mató a su marido? ¿O fue el mayordomo? ¿Y la madre? ¿o el hermano del señor Warwick? Todos parecen tener motivos para haber acabado con la vida del señor de la casa, pero... ¿quién lo hizo y por qué?
Esta magnífica pieza teatral, una de las más célebres de Agatha Christie, mantiene en vilo al espectador hasta el último segundo a lo largo de una trama magistralmente entretejida.
Pero algo en aquella extraña escena no encaja para Starkwedder, todos los hechos parecen evidentes... demasiado evidentes, así que decide no llamar a la policía. En la casa viven más personas y todos ellos son sospechosos del asesinato. ¿Fue Laura Warwick la que mató a su marido? ¿O fue el mayordomo? ¿Y la madre? ¿o el hermano del señor Warwick? Todos parecen tener motivos para haber acabado con la vida del señor de la casa, pero... ¿quién lo hizo y por qué?
Esta magnífica pieza teatral, una de las más célebres de Agatha Christie, mantiene en vilo al espectador hasta el último segundo a lo largo de una trama magistralmente entretejida.
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